Si después de tus rutas terminas con los brazos destrozados, el problema raramente está en tu técnica o tu forma física. La mayoría de veces viene de una suspensión mal ajustada o de un manillar que no absorbe las vibraciones como debería.
1. Ajusta el rebote de la horquilla: el primer paso para evitar la fatiga
Uno de los errores más comunes es no revisar los ajustes de la horquilla. Un rebote demasiado rápido transmite cada impacto directamente a tus brazos, y si esto se mantiene durante toda la ruta, terminas con sobrecarga muscular y el temido «arm pump» o bombeo de brazos.
Antes de cambiar componentes, revisa la presión del aire, el rebound y la compresión de tu horquilla. Un buen ajuste transforma completamente la sensación en bajadas técnicas.
2. El papel del manillar en la comodidad: no todos absorben igual
La flexibilidad del manillar también juega un papel fundamental. Algunos manillares amortiguan las vibraciones de forma natural, mientras que otros transmiten cada impacto directamente a tus muñecas y antebrazos como si fueran una barra de acero maciza.
OneUp Components ha diseñado sus manillares específicamente para solucionar este problema.
3. Manillar OneUp: diseño ovalado para reducir vibraciones y fatiga
El manillar OneUp usa un diseño patentado de barra ovalada que flexiona verticalmente en la zona central del manillar, justo donde más lo necesitas.
Esto tiene tres efectos directos:
- Reduce la vibración y el bombeo de brazos
- Mantiene el control y la rigidez de la dirección
- Consigue un tacto más suave y natural en cada bajada
Tanto la versión de carbono como la de aluminio están certificadas por el exigente Gravity Tri-Test Cat-5 de EFBE, que garantiza resistencia para todas las disciplinas desde Cross Country (XC) hasta Downhill (DH).
4. Nueva versión OneUp V2 Carbon: más flexibilidad, menos fatiga
La marca canadiense lanza el Manillar OneUp V2 Carbon con medidas actualizadas y una nueva altura de 50 mm.
Este modelo supera al V1 en flexibilidad:
- 13% más de flex vertical en 800 mm
- 33% más en 760 mm
- Tacto más suave en terrenos técnicos
Al cambiar de aluminio a carbono ahorras 100 gramos de peso en la bici sin perder resistencia.
Disponible en dos versiones con el mismo diseño ovalado:
Ambos modelos se pueden personalizar con vinilos en 10 colores.
Preguntas frecuentes sobre el manillar OneUp y la fatiga en los brazos
Vale la pena cambiar de manillar
El dolor de brazos después de una ruta larga no es inevitable. Como hemos visto, ajustar correctamente la suspensión y elegir un manillar con la flexibilidad adecuada puede transformar completamente tu experiencia sobre la bici. El OneUp V2 lleva estos principios al extremo con su diseño ovalado, que básicamente redistribuye las vibraciones de forma más inteligente que un manillar convencional.
¿Merece la pena la inversión? Si actualmente terminas tus rutas con los antebrazos machacados, probablemente sí. Y si dudas entre carbono y aluminio, recuerda que ambos comparten el mismo diseño que es lo que realmente marca la diferencia. El carbono te ahorra 100 gramos y ofrece algo más de absorción, pero el aluminio hace el mismo trabajo por menos dinero.